Cuando cierras los ojos.

Te veo desdibujarte
y me entristezco,
Solo pienso en poder mirarte cada día.

Quiero rozar tu mejilla y notar tu cuello.

Quiero que te rías y me mires sonriente
con esa sonrisa pícara

Quiero que me abraces,
quiero que juegues conmigo a hacer muecas.

Quiero bailar contigo por la calle
y hacer el ridículo delante de un montón de gente

Quiero admirar tu cuerpo,
quiero sentirme parte de tu vida
y ser estúpido al mismo tiempo.

Pero ya no puedo.

Lo cierto es que cada día te echo de menos.
No puedo evitar recordar tus ojos,
tu leve maquillaje en el rostro,
tu forma de sonreir,
tu pelo...

Tengo ganas de ver tu ropa
y tengo ganas de dejar de verla.

Quiero ver como el sol proyecta
cada sombra sobre tu cuello

Te echo mucho de menos, créeme.

Ahora las cosas no son distintas,
pero tengo que alejarme.

Quiero que sepas que pase lo que pase sigo recordando tu mirada,
y tus dedos sobre mi pelo
mientas pronuncias que no pasa nada

Echo de menos tu forma de vestir
y tu forma de andar
Echo de menos tu forma de ver la vida
y ese pequeño remolino en tu flequillo.

Creo que te necesito mucho,
pero no puedo seguir necesitándote.

Sólo espero que no cambies,
que sigas siendo tal y como eres.

Lo unico que quiero que recuerdes es...
que te quiero.

Sólo una cosa vuelve un sueño imposible: el miedo a fracasar. Paulo Coelho.

Hagamos el arte.