Tú eres yo

Al menos hoy no es domingo, pero con tanto café parece que se me han pegado las sábanas y no las entrañas. Hace demasiado sol, por eso finjo que leo el periódico mientras tú finges que no me lees. Lo malo es que hasta en la sección de sucesos hablan de ti. Del peligro de tu mirada y de los excesos de tus curvas. Tendré que poner la música bien alta para callar todas las palabras que gritan en la punta de la lengua. Qué lástima no escupírtelas entre las piernas.

Sabíamos que haciendo el amor en el fondo nos haríamos daño. Así que tuvimos mucha cautela en quitarnos la ropa rápido. Si follas de vértigo yo salto desde el edificio más alto. Deberíamos amarmos en cada esquina de la ciudad y cuando se quede sin salidas no tendremos otra opción que huir cogidos de la mano.

Sé que debería beber menos pero la cerveza me sabe a ti. Hasta si muerdo el asfalto me viene tu sabor a la boca. Esto va a ser una masacre. Sobre todo cuando cruzamos todos los semáforos en rojo. En urgencias tienen prohibido reconstruirnos otra vez los huesos. A mí nunca me ha importado mancharme las manos de sangre. Tentaremos a la suerte.

Lo nuestro no es imposible, simplemente aún no han hecho la película. Sabemos que se escribirá el guión. No se pueden dejar olvidadas historias que van a llenar las salas de cine y van a reflotar a la industria de las palomitas. Te veo en la última fila. Prometo haber olvidado las bragas. 

Las personas pasan la vida buscando a otras personas y yo me paso la vida buscándote a ti.

Por eso te voy a querer como nadie te ha querido,

porque lo que mejor sé hacer es quererme

y tú

eres yo.