Hay necesidad de ti

Hay necesidad de ti.

En esos niños que crecen demasiado deprisa,

que saben de abrazos cansados,

de horarios de cierre, de padres ausentes,

de lo que cuesta un juguete, un disfraz de rey mago

y una sonrisa.

Hay necesidad de ti.

En adolescentes que lanzan su rabia,

su confusión y su bilis,

por las ventanillas de coches tuneados,

en apocalípticas explanadas pavimentadas

con esperanzas malgastadas y cristales rotos.

Hay necesidad de ti.

En ese borracho de barra,

en ese poeta maldito y cirrótico,

que lleva sobre su espalda encorvada

el pesado eco de sus errores,

y en su aliento cuervos,

fechas y guadañas.

Hay necesidad de ti.

En ese gesto orgulloso

de tantos familiares que no se saludan,

que quedaron prisioneros del dolor,

que eligieron no mirar más allá

de la aduana del perdón,

patear una y otra vez la mierda y tatuarse “víctima”

Hay necesidad de ti.

En esos seres desorientados

que sustituyen el cariño con dinero,

justificando con el trabajo su deserción,

su impotencia,

para arrullos y caricias.

Hay necesidad de ti.

En esas miradas sedientas que gritan pidiendo labios,

en esos pasos que caminan solos

buscando con quién entrelazar sus manos,

sus huellas,

sus estelas, sus ilusiones y sus risas.

Hay necesidad de ti;

allá, más acá, aquí,

casi en todo lo que miro.

Sin embargo paseo abstraído bajo las sombras

y la aromática burla de tus frutas.

Esperando quizás que alcen el cuello

cansados de medir,

de intentar controlar y prever,

las piedras y las deformaciones del camino.

O quizás,

quizás,

esperando que te apiades,

que nos lluevas generoso con un otoño

de tu perenne primavera

…porque hay necesidad de ti,

amor,

hay necesidad de ti.